Bogotá, la magia de la capital colombiana
Por: Fernanda Moreno *
Descubrir la capital colombiana, es entretejerse por una ciudad multicultural, dejarse tentar por la variedad de comida internacional que ofrecen los diversos y elegantes restaurantes de la ciudad; adentrarse por su arquitectura biodiversa que va desde estilos coloniales, con balcones y coloridas fachadas; en La Candelaria, o el estilo inglés neogótico que se refleja en los barrios de La Merced o Teusaquillo, el imponente ladrillo a la vista de varias edificaciones modernas y urbanizaciones, la hacen merecedora del nombre de la ciudad del ladrillo, también goza en varias zonas de edificios modernos; hoteles famosos y de talla internacional se instalan cada vez más en esta ciudad, donde su turismo preponderante es el de negocios.
Dejarse tentar por un copita de chicha la bebida típica de los indígenas ancestrales que habitaron esta tierra; visitar su orfebrería y alfarería en los museos de la capital como son el museo del oro, donde encontrara el mayor tesoro de la tierra Colombia, acompañado de sus historias y su representativa leyenda del dorado la cual hace parte de la cosmogonía de los muiscas, habitantes en los tiempos ancestrales de esta ciudad.
También puede visitar el Museo Nacional uno de los más antiguos del país donde encontrará una sala dispuesta que narra a través de varios artistas y elementos la historia colombiana, llevándolo por un recorrido entre el pasado y la actualidad colombiana. El mismo museo posee su propia historia ya que antiguamente fue una de las prisiones más importantes del país. Otro de los museos que, no solo por las obras del reconocido pintor y escultor colombiano Fernando Botero, sino por su hermosa arquitectura y bellos jardines, valen la pena visitar, es el Museo de Botero.
Otra de las bellas y más románticas formas de disfrutar de Bogotá es ir a los miradores, el más representativo es el cerro de Monserrate a donde puede llegar a través de teleférico, funicular o si tiene el tiempo y las condiciones físicas, caminando. En la parte superior de este, encontrará una iglesia en donde se venera el Señor Caído de Monserrate es un punto importante para los feligreses católicos, allí puede encontrar famosos restaurantes como el Santa Clara y tomar un delicioso chocolate con queso o una muy típica agua de panela con queso para el frío capitalino, disfrutando de la imponente vista que te brinda este lugar de la ciudad.
El plato típico de la región de Bogotá y sus alrededores es el ajiaco santafereño, una deliciosa sopa hecha a base de una variedad de papas de la región entre ellas una muy peculiar la criolla de color amarillo y pequeña, otros de los elementos que no le puede faltar, es una planta que crece como hierba, en el campo de la sabana de Bogotá, “la guasca” y que le da ese sabor característico. Este plato generalmente va acompañado de una porción de arroz blanco y de una buena tajada de aguacate o palta.
Bogotá es una ciudad con grandes y espaciosos parques verdes, como lo son el Parque Nacional, el parque Simón bolívar y el Parque del Chico, entre los más reconocidos y recomendados para caminar y disfrutar. En estos la mayoría de fines de semana hay actividades deportivas, como aeróbicos, zumba y otras actividades para los habitantes y extranjeros, entre ellas una de las actividades más agradables para hacer el domingo en la ciudad es recorrer la ciclovía, ya sea en patines, bicicleta o caminando, es un espacio para compartir y hacer deporte a lo ancho y largo de la capital colombiana.
Continuando con los planes, algo que definitivamente tiene fama en esta capital colombiana es su rumba, esta es una de las mejores del país y encuentras la variedad que quieras en la oferta de bares y lugares para la fiesta, desde lugares de salsa, regué, rock, los de rumba crossover o los de bolero y tango. Tomate un traguito de aguardiente, el licor típico de la región, este es un destilado de anís que te calentará hasta los huesos.
Bogotá es una ciudad de contrastes, entre lo verde y la capa de asfalto, la cual va creciendo día a día, entre la calidad y cantidad de propios, regionales y extranjeros se yergue una ciudad que ofrece un toque de cultura, rumba y costumbres a todo aquel que la visite. Un lugar que te atrapa entre su caos y su belleza.
- Comunicadora y fotógrafa colombiana, especializada en temas culturales
Foto: Calles de la Candelaria