Tributo al medioambiente: Ciudades del mundo libres de autos
Copenhague -Dinamarca-
Fuera de nuestras fronteras hay un destino que presume de llevar a rajatabla eso de “sin coches se vive mejor”. Y es que Copenhague presume de contar con “una de las áreas peatonales más extensas y antiguas del mundo”, Strøget, un céntrico conjunto de calles de más de 3 kilómetros de longitud. Esta zona, creada en 1962 por el Ayuntamiento para paliar los problemas de circulación que afectaban al casco histórico, se ha consolidado como uno de los principales atractivos de la ciudad, especialmente para los amantes de las compras y para aquellos que quieren pasear al aire libre sin preocuparse de ruidos, humos o pasos de cebra.
Dubrovnik -Croacia-
También es recomendable recorrer a pie Dubrovnik, conocida como “la perla del Adriático”, ya que cuenta con un casco histórico totalmente peatonal, cercado por una muralla centenaria de casi dos kilómetros de largo que no permite la entrada a los coches. Una medida lógica teniendo en cuenta que la mayoría de las calles son estrechas y empinadas, y en algunos accesos hay que bajar un número considerable de escalones.
Oslo -Noruega-
Oslo esconde también numerosas zonas verdes y largos paseos libres de tráfico. Docenas de parques, 40 islas y dos ríos, además de una gran variedad de actividades al aire libre, muchas de ellas gratuitas. Como ocurre con la entrada al Vigeland Sculpture Park, que alberga más de 200 esculturas, fuentes y explanadas cubiertas de césped. Además de parques, existen otros rincones donde los coches no son bienvenidos, como el puerto, perfecto para pasear y disfrutar de la continua entrada de barcos. También en invierno, cuando la ciudad se tiñe de blanco, se puede renunciar al coche gracias a los caminos específicamente diseñados para recorrerlos con esquís.
Barcelona
También encontramos destinos como Barcelona, que es “una de las ciudades del Mediterráneo en las que mejor se circula en bicicleta”. Además, invita a descubrir algunos de sus reclamos turísticos a golpe de pedal, gracias a Bicing, su servicio público de bicicletas, que muy pronto, en 2017, incorporará a su oferta las bicicletas eléctricas.
Fuente: Julio Arnaldes de viajesboletin.com