Delta Air Lines auspició experiencia de vuelo simulado, a niños con habilidades especiales
Por sétimo año consecutivo, más de 400 alumnos con autismo, síndrome de Down y deficiencias cognitivas, participaron de un vuelo simulado. Esta experiencia innovadora y única fue posible gracias al apoyo de Delta Air Lines, en las instalaciones del Centro Ann Sullivan del Perú (CASP).
El objetivo de esta práctica del vuelo simulado consiste en que los alumnos del CASP aprendan toda la secuencia que implica viajar en un avión y estén preparados para afrontar dicha experiencia en la vida real.
“Es una iniciativa inspiradora que una compañía como Delta apueste por las personas con habilidades diferentes por sétimo año, y que siempre nos pregunten cómo poder mejorarla. Esta experiencia ayuda a que nuestros estudiantes puedan, como cualquier otra persona, disfrutar de un viaje por avión. También los prepara a ser más independientes cuando tengan que salir con sus padres y los profesionales del CASP a compartir sus progresos en diferentes ciudades del Perú con el Programa Madre a Madre”, refiere la Dra. Liliana Mayo, Directora Ejecutiva y Fundadora del Centro Ann Sullivan del Perú-CASP.
Durante el evento los estudiantes simularon todos los pasos que un pasajero realiza antes y durante el vuelo. Ellos practicaron cómo movilizarse hacia el aeropuerto, esperaron su turno de atención para hacer el check in de su vuelo, entregaron sus maletas, esperaron en la sala de embarque, subieron al avión y se ubicaron en el asiento que les correspondía de acuerdo con su pase de abordar. También aprendieron a proporcionar sus datos personales (nombre, apellidos, edad, dirección), cuidar sus pertenencias y seguir las instrucciones de la tripulación.
Finalmente, el Centro Ann Sullivan del Perú (CASP) ofreció un entrenamiento a los ejecutivos de DELTA tanto de Perú como de otros países, incluyendo a tres miembros que vienen de Atlanta para seguir el curso “Yo también soy un Cliente”